Una de las garantías que la ley le brinda a los partidos y movimientos políticos con personería jurídica en los procesos electorales para que en los mismos haya transparencia, es la realización de los comités de seguimiento electoral en todos los municipios de Colombia.
Estos comités son encabezados por la alcaldía y la Registraduría municipal y cuentan con la participación de la Procuraduría, la policía entre otros y participan de ellos los movimientos o partidos políticos que inscribieron candidatos al primer cargo, concejo y Juntas administradoras locales.
Todos los mencionados, es decir los partidos o movimientos políticos participantes en la contienda son invitados por parte de la Registraduría y la administración municipal.
Hasta ahí todo está bien y hace parte de las garantías electorales que deben existir en estos procesos de tanta importancia nivel local y departamental.
Ayer en los salones de la Cámara de Comercio local, se llevó a cabo el noveno comité de seguimiento electoral dentro del proceso electoral que se realizara el próximo 27 de octubre y oh sorpresa, la gran mayoría de partidos o movimientos que están inscritos para participar en la justa electoral, brillaron por su ausencia.
Pero al parecer no es la primera vez que los partidos o movimientos políticos no van a los comités de seguimiento electoral ni envían sus delegados, como debería ser su obligación para estar al tanto de cómo va el proceso de organización de la justa electoral.
Esta ausencia a un evento organizacional de la justa electoral no tiene ninguna justificación, porque muy seguramente esos partidos o movimientos serán los primeros en salir a criticar la organización de las elecciones.
De los seis candidatos inscritos para la alcaldía, solo había tres representantes de ellos a saber, el liberal, el del polo y el representante del candidato que se inscribió por firmas, los demás brillaron por su ausencia.
Pero muy seguramente esos que no asisten, serán los primeros que saldrán a criticar y pedir garantías dentro del proceso electoral y a reclamar que sus derechos al sufragio de los electores, fue vulnerado por la organización.
La organización electoral, está realizando su trabajo como lo establece la ley, que los que deben estar al tanto de las acciones que adelantan, no asistan por no considerarlo de pronto importante, no es su responsabilidad.
La democracia se construye entre todos.