En medio de escenas de dolor y ante miles de personas solidarias se realizó el sepelio colectivo de los cinco niños que murieron el pasado 25 de agosto, incinerados en una vivienda en Crucito, corregimiento del municipio de Tierralta, sur de Córdoba.
Solo hasta este jueves Medicina Legal entregó los cuerpos, plenamente identificados, y de inmediato fueron trasladados hasta el municipio de Tierralta. Se hizo un homenaje póstumo en el parque Santiago Canabal donde asistieron miles de personas.
Los sacerdotes de las parroquias San Pedro Claver y San José del municipio de Tierralta, así como el pastor de Crucito fueron los encargados de presidir el homenaje, en medio de una calle de honor que hicieron los estudiantes de todas las instituciones educativas de la localidad.
«Los niños pertenecen al reino de los cileos y con ellos está Dios», dijo el pastor en medio de las lágrimas de los asistentres, quienes lamentaron el final trágico de los menores Leidy Marmoleno, de 8 años; Yadis Pozo Marmolejo, de 3 años; Levis Marmolejo, de 5 años; Féder Fernández, de 4 años, y Adriana Marmolejo de 8 meses.
Como se recordará, el pasado 25 de agosto, tres madres dejaron a los cinco pequeños en una vivienda y salieron a una fiesta en la plaza principal del pueblo. La primera hipótesis es que dejaron una veladora encendida y que esta causó el incendio que devoró la vivienda de palma en cuestión de segundos.
Pese a que los vecinos, al percatarse del hecho, trataron de derribar la puerta, fue imposible lograrlo debido a que se encontraba amarrada y el fuego la consumía de manera rápida.
Con relación a las tres madres, identificadas como Yanidis Marmolejo, Yeidis Marmolejo Pérez y Yorlenis Ramos Pérez, se indicó que permanecen bajo custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Icbf.
Finalmente, la Policía indicó que está adelantando las investigaciones correspondientes, pues no descartan que el incendio lo hayan iniciado manos criminales, y advierten que los estudios de Medicina Legal arrojarán pistas sobre el hecho.