Al ver que su padre agredía de manera salvaje a sus hermanas menores, Kenia Medrano, de 24 años, salió en su defensa. Sin embargo, su hazaña le costó, de manera literal, un ojo de la cara, en hechos ocurridos en Magangué.
El padre de Kenia le pegaba a sus dos hermanas con un cinturón y esta le gritó que esa no era la manera de solucionar el problema, pero el hombre seguía. Al ver que su papá, Rafael Augusto Medrano, no reaccionaba, se acercó pero de manera inesperada, recibió un fuerte golpe en el ojo derecho con la hebilla del cinturón. Los gritos de Kenia hicieron que su padre se detuviera y fue a ver qué le había pasado.
Conocidos llevaron a la joven al hospital local. Sin embargo, los médicos manifestaron que no se podía hacer algo al respecto y la joven perdió el ojo.
Ahora debe usar una prótesis. Cuando Kenia salió del hospital, instauró la denuncia por violencia intrafamiliar en contra de Rafael, de 42 años, quien es pensionado de la Armada. Lo capturaron y fue enviado a la cárcel. La Fiscalía afirma que Rafael tiene antecedentes, tras ser señalado de incurrir en el delito de abuso sexual con menor.