
Patriota es aquél que ama y le es leal profundamente a su patria, eso fue Charles De Gaulle, por su liderazgo a la resistencia del dominio de los Nazis en territorio francés en la segunda guerra mundial, adquirió, gran admiración y respeto, de sus compatriotas, tanto, es así que el aeropuerto principal y más importante de París, lleva su nombre, Aeropuerto Internacional, Charles De Gaulle, para que eternamente el recuerdo de sus acciones útiles para la liberación de los franceses y del mundo del dominio de la tiranía de Adolf Hitler, el mundo lo guarde en su memoria.
Al posicionarse los alemanes del norte de Francia al principio de la segunda guerra mundial, al sur de esa nación estuvo dirigida por el gobierno de Vichi (ciudad francesa), en cabeza del general Philippe Pétain, que se hizo famoso entre los franceses por comandar al ejército francés que resultó victorioso en la batalla de Verdún (ciudad de Francia) en la primera guerra mundial, pero Pétain como lo registra la historia, traicionó a Francia, siendo partidario que imperara en su nación el régimen fascista que pretendía extender Hitler por todo el planeta tierra, hasta el extremo, que firmó una tregua con los Alemanes, que implicaba cese de resistencia contra los Nazis, mientras, por otro lado De Gaulle, a diferencia de la posición desleal de Pétain, se opuso abiertamente a cualquier idea de rendición, prefirió huir de Francia y radicarse en Gran Bretaña, y desde ahí continuar la guerra contra Alemania, incentivando con alocuciones radiales que eran escuchadas por los franceses, a los partidarios de la resistencia, a que siguieran en pie de lucha, hasta cuando Dios lo quisiera, y mediante este procedimiento mantuvo animado a millones de franceses, que permanecieron gracias a ello, combatiendo en la forma como pudieran en contra del despotismo de los Alemanes.
Churchil, que era primer ministro de Gran Bretaña para ese tiempo, y De Gaulle se convirtieron en dos figuras temibles para los alemanes, la unión entre los dos, fue por necesidad para defender a ambos países, lo tenían que hacer, Churchil como lo señalé en un artículo anterior, previó las ambiciones de poder del dictador Hitler; interpretó con buen acierto, que Hitler no se iba a conformar con sólo ocupar a Francia, era un paso que tenía que dar para después invadir a Gran Bretaña, y fue por ello que se produjo esta alianza histórica entre Francia y Gran Bretaña; coordinaron entre los dos la defensa de ambas naciones, Churchil para fortalecer el ejército francés, ordenó mandar tropas a territorios franceses, que a la postre fracasó por el cruel bombardeo aéreo que ejecutó la aviación alemana en la costa de Dunkerque, que obligó a los ingleses su retirada de ese sitio y regresar a su país.
De Gaulle y Churchil constituyó una dupla decisiva para que fructificara el desembarco en Normandía del día D, de más de un millón de tropas aliadas, canadienses, ingleses, rusos, franceses, norteamericanas que ya habían entrado a la guerra, y del cual los ingleses todavía es la hora que perduran agradecidos de los Norteamericanos por su oportuna e importante intervención en la guerra, son de la opinión que los norteamericanos salvaron a Inglaterra de la tiranía del lunático Hitler, y es la razón por el cual y ustedes deben de notarlo, que en todo conflicto que involucre a los norteamericanos con cualquier otro país, a su lado ahí están los Ingleses, respaldando sus proyectos políticos y militares, la presencia de los aliados en territorio francés con el memorable desembarco de Normandía (Región costera francesa), fue el principio del fin de Hitler, los alemanes terminaron siendo desalojados de territorio francés y Paris rescatado, mientras que los rusos por otro lado entraban con fuerza en territorio alemán, dando los primeros pasos para la rendición definitiva de los Arios.
Pétain, con la liberación de Francia al mando de De Gaulle, fue procesado por el delito de traición a la patria, condenado a pena de muerte, gracias a una oratoria jurídica de su defensor, un famoso abogado francés, se le conmutó la pena a muerte, por cadena perpetua, mientras que De Gaulle fue elegido presidente de Francia, repitiendo la presidencia varias veces, y hubiera sido presidente de Francia cuantas veces hubiera querido, como lo pueden hacer los grandes hombres.
Aquí parte de una de las alocuciones por radio de De Gaulle, desde Londres, ciudad capital de Inglaterra.
“esta guerra no se limita a nuestro desafortunado país, esta es una guerra mundial. Se han cometido errores, se han producido retrasos y se ha padecido un sufrimiento indecible, pero el hecho sigue siendo que todavía existe en el mundo todo cuanto necesitamos para aniquilar a nuestros enemigos algún día. Hoy nosotros somos aplastados por el peso rotundo de las fuerzas mecanizadas lanzadas contra nosotros, pero aún podemos mirar hacia un futuro en la que una fuerza mecanizada incluso mayor nos conduzca a la victoria. Está en juego el destino del mundo.
Yo, el general De Gaulle, actualmente en Londres, hago un llamamiento a todos los oficiales y hombres franceses que se encuentran en suelo británico, o que puedan estarlo en el futuro, con o sin sus armas; hago un llamamiento a todos los ingenieros y profesionales calificados de la fábrica de armamento que se encuentren en suelo británico o puedan estarlo en el futuro para que se pongan en contacto conmigo, suceda lo que suceda la llama de la resistencia francesa no puede morir, y no morirá”