Ayer en horas de la tarde, en medio de muestras de afecto, dolor y mucha tristeza, se cumplieron las exequias de la reconocida dirigente y exaspirante al Concejo de Magangué, Miryam Barros de Alí.
Igual a su vida, rodeada de amigos que le manifestaron sus afectos y en medio de arengas de amistad, el cuerpo de Millo, como era conocida por sus allegados, fue trasladado en primera instancia de la Funeraria Los Olivos hasta la iglesia Cristo Buen Pastor del barrio San Martín, donde el ex alcalde, Arcesio Pérez y la líder Tavita en nombre de la familia Alfonso López, muy cercanos a Miryam, le dieron públicamente y en medio de muestras de dolor, la despedida a su gran amiga.
Posteriormente su cuerpo fue trasladado al Cementerio Jardines de La Candelaria, donde en medio del llanto, mariachis y las canciones de «El Colombiano», le dieron el último adiós a la amiga, la madre, la mujer. Paz en su Tumba.