Si usted quiere darse cuenta de la magnitud de los saqueos al tesoro público, basta con inventariar las obras, o elefantes blancos, que se extienden vergonzosamente por todo el territorio nacional.
Lo más grave es que muchas de ellas tienen la complicidad de exministros, congresistas, gobernadores, alcaldes y los politiqueros de pueblo, que sirven de comodín a los defraudadores mayores, guardándoles sus nefastos secretos a costa de dádivas y posiciones burocráticas.
En Magangué se pueden enumerar varios elefantes blancos. En esta categoría podrían catalogarse las obras de construcción del microacueducto del barrio Villa Juliana, las cuales fueron ejecutadas a medias por la anterior Administración Municipal.
Es importante recordar que la firma contratista de este proyecto fue la Asociación de Municipios de Córdoba (Amucórdoba).
Particularidad del contrato
El gobierno anterior contrató inicialmente la instalación de un tanque de almacenamiento de agua por 200 millones de pesos, pero al parecer el propietario del predio ubicado en las cercanías de la urbanización no permitió el inicio de los trabajos.
Ante esta problemática, esa Administración Municipal hizo un otrosí y cambió totalmente el objeto del contrato, el cual paso a establecer la construcción de un microacueducto por 300 millones de pesos.
En total abandono
Amucórdoba, después de varias prorrogas y adiciones presupuestales, finalmente no cumplió con el objeto del contrato, y hoy, este microacueducto se encuentra totalmente abandonado y lo poco que queda ha sido hurtado por los delincuentes.
Redes de acueducto
Por fortuna la Alcaldía de Magangué, en cabeza del primer mandatario Pedro Alí Alí, lideró un proceso extenso y finalmente logró en consenso con la comunidad la conexión a las redes de acueducto, permitiendo así que cada una de las viviendas de Villa Juliana recibiese agua potable.
Y aunque aún se erige como un elefante blanco, para los habitantes de esta popular localidad, está vez el “remedio fue mejor que la enfermedad”.