Un año después de que la EPS Medimás entrase a operar en el país para más de 5 millones de usuarios, en reemplazo de Cafesalud, para la mayoría de ciudadanos la entidad en Magangué no ha cumplido con su principal premisa, mejorar la calidad de los servicios de la salud.
“Hasta el momento no hemos visto implementado ese gran modelo de atención que anunciaron los directivos de la EPS. Las citas y la entrega de medicamentos continúan fallando”, manifestó Ana Cristina Olarte, usuaria que tiene más de cuatro meses esperando la entrega de una medicina.
Y es verdad, en la farmacia de esa entidad no hay ni acetaminofén, una medicina barata y fácil de conseguir.
Se registran traumatismos
Según Jorge Gómez Cusnir, vocero de Medimás, todos los tratamientos que vienen en curso, servicios de atención, urgencias, hospitalización, atención domiciliaria y los procedimientos que estén previamente autorizados y programados, seguirán su curso normal. Sin embargo, la realidad en Magangué es otra.
Hasta el momento la EPS no tiene convenio con el hospital La Divina Misericordia, lo que impide que se asignen las citas con especialistas. Es más, procedimientos normales como exámenes de sangre, orina o coprológico, tampoco están disponibles.