El insigne escritor, poeta, historiador y gestor cultural, Antonio Botero Palacio, fallecido ayer a los 92 años en una clínica de la ciudad de Medellín, será sepultado en Magangué, según le dijo a este diario uno de sus familiares muy cercanos.
El cuerpo del autor de la letra del himno de Magangué, llegará a esta ciudad hoy en las horas de la noche y aún no se ha confirmado en que sitio será su velación, ni tampoco sus honras fúnebres, aunque según se conoció, estas últimas se realizarían mañana martes.
Don Antonio, como era conocido, fue hospitalizado en esta ciudad hace varios días, víctima de un problema cardíaco, y ante la gravedad que mostró su salud, fue trasladado a la ciudad de Medellín, donde ayer un poco antes de las 3 de la tarde, dejó de existir.
Del hoy fallecido, se destaca que, aunque había nacido en el departamento de Antioquia, llegó a esta ciudad hace más de 60 años y la amó como el que más, siendo uno de los más grandes investigadores sobre la historia de este municipio.
Biografía
Poeta, narrador, ensayista y antologista, nació el 15 de abril de 1927 en el corregimiento de Mesopotamia, Municipio de La Unión en el progresista departamento de Antioquia, en hogar formado por Próspero Botero Restrepo y Carlota Palacio Campuzano.
Sus primeros estudios los realizó en la Escuela Rural “General de Paula Santander” de su pueblo natal. De profesión Maestro, título que obtuvo rubricado por el entonces Ministro de Educación, Don Germán Arciniegas, en la Escuela Normal de Varones Manizales, en donde estudió becado. Durante diez años consecutivos ejerció el magisterio en diversos pueblos y veredas de Antioquia.
A causa de la violencia desatada en el país, inició un periplo por varias ciudades del Caribe Colombiano, y cayó en las fauces de su magia y hechizo, y una tarde con todos los cachivaches y sus cajas llenas libros y apuntes, acompañado de Marta, la otra mitad de su existencia, canaleteando en las encantadas aguas del Río Grande de la Magdalena la barca de los sueños, entre el follaje tupido de taruyas, caimanes, iguanas y babillas, fondeó en la Albarrada de Magangué, cuyo amarre, aún tantos y tantos años después, no ha podido desatar.
Su actividad literaria la inició con el teatro, género en el cual se ha desempeñado como actor y director. Entre sus obras de teatro publicadas en periódicos y revistas están “Abismos”, “Machismo”, “El pleito” y “Blanca como una azucena”.
Ha publicado los libros “Al final de la Inocencia”, novela autobiográfica (1999), “La Batalla de Magangué en la Guerra de los Mil Días” (2005), “Desde los lagares del Alma” (2007).
Conjuntamente con su hermano Próspero, publicó “La Batalla de Magangué durante la Guerra de los Mil días” (2009), “Historia de Magangué” (2011) e “Historia del Municipio de La Unión – Antioquia” – Distrito Centenario (2011).
Tiene inéditos los libros “Anecdotario de Magangué” y “Óscar Delgado, poeta”, “Nido de Ángel”, novela y Hierbajos que han crecido a la orilla de mi vida.
Es miembro fundador del Centro de Historia Villa de Magangué, Miembro de Número de la Academia de Historia de Mompox, de la Asociación de Escritores de la Costa, de la cual es miembro fundador, en el 2010 fue elegido presidente de Parlamento Nacional de Escritores de Colombia.
Además ostenta la Categoría de Presidente Honorario de la Fundación “Arte y Ciencia” de Medellín y Escritor Emérito otorgado por la Asociación de Escritores de la Costa. La gobernación de Bolívar le otorgó la Medalla al Mérito Luis Carlos López.