Desde hace un par de años atrás, entre los adolescentes del mundo se viene dando una tendencia llamada ‘cutting’ o ‘self injury’, que consiste en cortarse la piel con una navaja u objeto afilado para marcarse el cuerpo, especialmente muñecas y brazos con el fin de buscar un alivio emocional.
Magangué no es la excepción, pues algunos jóvenes del municipio aparentemente se están autoagrediendo, muchas veces, por el dolor causado tras dificultades en el entorno familiar.
“Hemos podido documentar 5 casos de adolescentes que están entre 12 y 17 años con heridas en diferentes partes de sus cuerpos que se realizan de forma repetitiva”, manifestó el capitán Andrés Vargas Urrego, jefe de la Seccional de Protección del Departamento de Bolívar.
En la mayoría de las situaciones, estas conductas de hacerse daño pueden generarse por cambios de ánimo y problemas de autoestima.
“Entre las causas hay varias, pero es importante saber que las instituciones educativas de la ciudad no saben cómo abordar y hacer acompañamiento sobre este tema. Queremos alertar a las diferentes autoridades competentes para que actúen y busquen soluciones”, puntualizó Vargas Urrego.
Vínculo afectivo con las familias
Este medio consultó a la psicóloga Stefany Cortés, quien a su vez aseveró que en el contexto escolar y en la mayoría de los casos se han identificado, como factor asociado a esta tendencia, el vínculo afectivo que se registra en las familias. Es decir, que exista violencia intrafamiliar, padres separados o el inicio de nuevos hogares por parte de cada uno de ellos.
“Estas características en las familias puede producir que estos jovencitos utilicen esta modalidad para alivianar el sentimiento de angustia, miedo o temor. Esto porque, aparentemente, ellos no tienen la posibilidad de expresar sus sentimientos”, expresó Cortés.
Promueven agresión
Según expertos, se ha podido determinar que en redes sociales existen comunidades con perfiles de grupos donde promueven e invitan a los adolescentes a la autoagresión.