
Desde el primero de febrero Uber dejará de operar en Colombia y desde que la multinacional lo anunció se han escuchado voces a favor y en contra, como la del senador bolivarense Andrés García Zuccardi.
El congresista lamentó la decisión y señaló que esto dejará sin empleo a los 88 mil conductores que cuales usaban la aplicación como medio alternativo de trabajo, y a los 2 millones de usuarios que se beneficiaban con la aplicación en Colombia, explicando que la multinacional tomó la decisión tras los castigos y presiones por parte del gremio de taxistas al Gobierno nacional para que saque de circulación a la aplicación en Colombia.
“Esta decisión afecta la economía, el desempleo, la competitividad, la productividad, la pobreza, la desigualdad, la informalidad y los sobrecostos en el país. Es una mala noticia para la economía, los emprendimientos y la generación de empleo en Colombia, pero en especial para los usuarios y socios conductores que utilizan la plataforma ya que son los más afectados o porque quedan sin empleo o pagando costos más altos a cambio de servicios de menor calidad”, aseguró Zuccardi.
También dijo que con la salida de esta multinacional de Colombia, el Gobierno está enviando un mensaje negativo y les está cerrando las puertas a las multinacionales que estén pensando en invertir en Colombia. “El mensaje que debe enviar el Estado colombiano a las multinacionales como UBER debe ser positivo y que aquí trabajamos día y noche por generar más y mejores oportunidades de empleo, empleabilidad y emprendimiento que mejoran la calidad de vida de los colombianos”, afirmó.
Destacó que para que Uber regrese a Colombia, el Gobierno nacional deberá regular a través de medidas legales y normativas que garanticen su libre funcionamiento y le permitan trabajar en igualdad de condiciones a taxistas y socios de la aplicación en el país.
“El primer debate que realizó el Congreso de Colombia frente a Uber fue en el 16 de septiembre de 2014 y la primera iniciativa legislativa para regularlo fue en el proyecto de ley 93 de noviembre de 2014. Consideramos vital para la economía de Colombia que multinacionales como Uber inviertan y generen empleo. La salida de esta multinacional perjudica no solo a los usuarios, sino también a las más de 88 mil familias beneficiados de los empleos directos de la aplicación en su modalidad de transporte individual, los miles de colombianos que se benefician de sus otros servicios como UBER EATS y alquiler de monopatines y desarrollos e inversiones a futuro como UBER FREIGHT y carros autónomos, al igual que pérdidas considerables en inclusión financiera, formalización y cientos de miles de millones en impuestos. Sufre toda Colombia porque perdemos competitividad, perdemos productividad y pagamos todo más caro a causa de sobreprotección y un modelo obsoleto de cupos en la modalidad de transporte público individual de pasajeros. La solución no es satanizar, sino apoyar al sector en su proceso de modernización ”, concluyó el congresista.