En la noche de este viernes un tramo del jarillón Sur, a la altura del barrio Girardot de Magangué, colapsó y fue arrastrado por el río Magdalena, colocando en peligro a las familias que habitan en el sector.
El primer mandatario local, Carlos Cabrales Isaac, se desplazó al sitio de la emergencia, pero se encontró con un grupo de moradores enojados, que por poco lo linchan.
Los habitantes inconformes apoyados por algunos concejales aseguraron que, el rompimiento del jarillón no fue un caso fortuito sino una consecuencia que se veía venir.
«La Administración Municipal se podía preparar mejor para afrontar la emergencia. Tuvo tiempo para planificar la reubicación de estas familias en un lugar digno», dijo la cabildante Concepción Velásquez.
Las acciones
Tras un Comité Extraordinario de Gestión del Riesgo que se desarrolló en la mañana de este sábado, se acordó activar el protocolo de evacuación, iniciando con un censo en la zona afectada, para dar paso a la evacuación de las familias con mayor riesgo.
Para tal fin, el Centro de Alto Rendimiento fue dispuesto como albergue temporal. La Alcaldía cubrirá las necesidades mínimas para las familias, (alimentación, transporte, entre otros).
Por su parte, Cabrales Isaac ofició a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y al presidente Gustavo Petro sobre la situación, esperando cierto apoyo para atender esta emergencia.
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