Una emergencia se registró el miércoles en horas de la mañana en el corregimiento de Barbosa, jurisdicción de Magangué. El jarillón que protege a esa población de los embates de las lluvias y el furor del río Magdalena se rompió.
Según habitantes de la población ribereña, lo sucedido en la estructura no fue por obra de la naturaleza, al parecer personas inescrupulosas abrieron un boquete, lo que permitió el ingreso de las aguas a la población.
El rompimiento del jarillón generó alarma entre los moradores, quienes solicitaron de inmediato la intervención de la Administración Municipal.
Reunión del CMGRD
Con el propósito de abordar la situación en Barbosa, miembros del Comité Municipal para la Gestión del Riesgo de Desastres (CMGRD), se reunieron en el Centro Administrativo Municipal (CAM).
Para hoy está programada la visita de una comisión que se desplazará a la zona a evaluar los daños y tomar medidas.
En el encuentro, los asistentes analizaron las condiciones y las diferentes estrategias que permitan la realización de las corralejas de Cascajal.