Juan Manuel Arrieta Miranda tiene un día tranquilo, como la mayoría. Está en el barrio Guarigua -San Pablo, en el Sur de Bolívar-, cerca de su casa, pero de repente esa tranquilidad que lo acompaña se viste de tragedia. Dos balazos suenan y van directo al cuerpo de Juan, quien en cuestión de segundos fallece.
Falta poco para las 9 de la noche cuando la sangre de Arrieta, de 42 años, es derramada por acción de un sujeto que se desplaza en moto. El presunto matón huye con la certeza de que ha cumplido con su “tarea”, pero Juan aún respira. Los segundos que le quedan los emplea para decirle a su mujer quien es el responsable de su muerte: un sujeto que minutos después también es asesinado.
Las balas que se alojan en el cuerpo de Juan Manuel, más conocido en el municipio de San Pablo como ‘Alex Barranca’, no son letales en su momento. Los testigos del ataque sicarial lo llevan a un centro asistencial, pero antes, la víctima decide llamar a su mujer.
Presintiendo que le queda el mínimo tiempo, le dice a su compañera sentimental quien es el hombre que le dispara. Después de la confesión, los médicos no tardan en dar la mala noticia: Juan Manuel ha muerto.
¿Ajusticiado?
En medio del dolor, los familiares de ‘Alex Barranca’ no deben esperar mucho para ver la justicia o más bien ver cumplir el famoso refrán de “el que a hierro mata a hierro muere”.
Media hora después del crimen de Juan, en el barrio Belén, también en San Pablo, es acribillado José Fernando García Bedoya, a quien llamaban ‘Morroco’, y de quien dice la Policía sería quien jala el gatillo contra Arrieta Miranda.
“El joven sería la persona que dispara contra el señor, de 42 años. Estamos investigando si se trata de un ajuste de cuentas en ambos episodios y si bandas delincuenciales están tras estos hechos”, manifiesta una fuente judicial.
De Juan Manuel se sabe que era prestamista y que será sepultado en Medellín.
