Miedo, las calles de Magangué

Salir hacer diligencias por los centros comerciales de este bello cálido puerto, o por sus barrios de gente humilde noble y trabajadora, se ha convertido en un miedo enorme, debido a la inseguridad total que se vive, todos los días los raponeros haciendo de las suyas, robos, atracos, ese es el pan diario y como que Magangué no tiene dolientes.

En las últimas dos semanas el terror se ha incrementado, han asesinados líderes sociales, uno en el camino de Barranca, y la semana pasada el humilde luchador social Luis Peña, y no pasa nada. El día sábado 10 de diciembre asesina al doctor en derecho……………………… en la puerta de su humilde vivienda. ¿Qué pasa por favor, con la seguridad de Magangué?

Las “investigaciones, quedan en investigaciones”. Que no llegan a nada de nada. ¿consejos de seguridad y..? y así ha pasado con muchos crímenes en este puerto. Las autoridades municipales y sus coadministradores, deben urgentemente solicitar apoyo a nivel departamental y nacional, y conjuntamente trazarse estrategias que 

permitan la seguridad de sus habitantes y corregimientos, que se logre mitigar la ola de violencia por la que atraviesa Magangué.

Parece ser que este municipio está acéfalo en estrategias de seguridad, con tantas tecnología y avances en seguridad, la segunda población del departamento, no la tenga, no tiene papá, tío ni abuelo, que vele y luche por unas mejores condiciones de convivencia y seguridad, como lo establece la Constitución.

Pero no, aquí no hay doliente y nos están atracando, robando y asesinando en nuestras narices. Ya es hora. Mandatarios que a Magangué se le brinden otras condiciones de bienestar social, despierten por favor, se quiere una paz total, no una violencia total.

Ahorita se nos vienen las próximas elecciones y vamos a encontrar los mismos políticos visitando barrios y corregimientos con una sonrisa de oreja a oreja, no caigan en esa misma sintomatología de siempre, que los administradores no lleguen los mismos, sino personas limpias, honestas y responsable, y que no estén untadas de corruptela, que luchen por el bienestar y la seguridad de esta población.