El paro camionero que se vive en el Magdalena Medio ha desencadenado un severo desabastecimiento de combustible y productos básicos en los municipios del sur de Bolívar, siendo Puerto Wilches uno de los más golpeados. Las bombas de gasolina se vieron atiborradas de vehículos en busca del poco combustible disponible, mientras que las estanterías de los supermercados muestran escasez de verduras y otros productos de la canasta familiar.
El comercio en la región se encuentra gravemente afectado, con empresarios advirtiendo que, de continuar los bloqueos, solo podrán sostener sus operaciones durante 4 o 5 días más. Municipios como San Pablo, Simití y Santa Rosa del Sur también enfrentan un aumento desmedido en los precios de los alimentos, perjudicando principalmente a las familias más vulnerables.
Fenalco Santander ha hecho un llamado urgente para que el Gobierno tome medidas inmediatas y se restablezca el abastecimiento en la región. La situación es crítica, y si no se toman decisiones rápidas, el impacto en la economía local podría ser devastador.