Un estudio de Fedesarrollo estima una contracción de la economía colombiana en 2020 no inferior al 2,7%, esto obedeciendo a un menor ritmo de actividad económica sectorial y a una reducción sustancial en el consumo de los hogares y como resultado de la caída en los precios internacionales del petróleo, la medida de aislamiento preventivo obligatorio para mitigar los impactos del COVID-19 en el país y el distanciamiento social que se mantendrá en el mediano plazo.
De acuerdo con el centro de estudios, los mayores efectos negativos se materializarán en el segundo trimestre del año, donde se espera una contracción del ritmo de actividad productiva de -9,4%.
Cabe resaltar que el ritmo de crecimiento de la economía colombiana dependerá de la extensión del aislamiento preventivo y la duración de la reactivación de los sectores productivos, por lo cual se plantean tres escenarios.
El escenario “V” parte del supuesto de que la duración de la cuarentena va hasta mediados de mayo y la economía se recupera relativamente rápido después del choque, retomando paulatinamente su capacidad productiva durante el segundo semestre del año.
El escenario “W” refleja una recuperación de la economía posterior al levantamiento de la primera cuarentena en mediados de mayo y una caída adicional de la actividad producto de una segunda cuarentena después del mes de mayo. Por último, el escenario “U” supone una muy débil recuperación del consumo privado durante lo que resta del año.
Con base en estos escenarios, Fedesarrollo estima que la tasa de desempleo subiría del 10,5% observado el año anterior al 16,3% en el escenario más optimista, lo que implicaría que 1,4 millones de personas adicionales quedarían desempleadas. En el escenario “W” la tasa de desempleo subiría a 18,2% y en el “U” al 20,5%.