Si usted tiene los labios resecos o suele mordérselos, le contamos por qué es malo y qué puede hacer para evitarlo.
Nuestros labios están expuestos a muchos agentes negativos en el ambiente, la mugre, los gérmenes en el aire, los rayos ultravioleta, la comida que ingerimos, protegiendo, al final, nuestra boca.
Pero, en ciertos casos, no se tiene mucho cuidado con ello, hay personas que manifiestan tics nerviosos, sintiendo necesidad de morderlos, lastimándolos, incluso, dejando heridas, aunque lo más común es que, debido a las temperaturas bajas y la poca hidratación del cuerpo, los labios se resecan y nos arrancamos los cueritos, pellejos o piel muerta, pero ¿está mal hacerlo?
No es grave arrancar o morderse la piel que sobresale sobre los labios, solo que puede empeorar el problema, así como lamerlos. Hay que entender que, así como la piel se quema o se lastima después de un día de broncearse, a los labios también les sucede lo mismo, porque en su parte exterior están recubiertos de piel, solo que más sensible. Y ante la presencia de los rayos UV, el clima seco y el viento frío es normal que estos carezcan de hidratación.
Para evitar esto, hay que empezar a cuidarlos. Compre una barra labial humectante con un FPS (factor de protección solar) de mínimo 15, repítalo unas cuantas veces al día. Aparte no seguir arrancando y lamiendo, una opción efectiva es exfoliarlos regularmente, una vez por semana es lo ideal, para hacerlo: escoja un cepillo de dientes de cerdas suave, humedezca los labios con agua tibia, a continuación cepillelos en forma circular, no lo haga demasiado fuerte.
También exista la opción de mezclar azúcar con miel, es menos agresiva que la anterior, masajee también en círculos. Después de exfoliar, manténgalos hidratados a base de bálsamos como, manteca karité, manteca de cacao, aceite de jojoba, aceite de aguacate, entre otros.
Otros remedios o consejos es el uso de vaselina y azúcar con aceite de oliva.
Evite los alimentos cargados en sal. Por supuesto, no olvide que el consumo de líquidos es fundamental, ya sea agua o jugos bajos en azúcar, preferiblemente, beber agua.