Cláudia Albuquerque Celada, una joven estudiante brasileña de 23 años, enfrenta una batalla crítica contra una rara enfermedad conocida como botulismo, adquirida tras consumir una sopa infectada con la bacteria Clostridium botulinum. Esta peligrosa infección ataca el sistema nervioso y puede causar parálisis severa.
Los síntomas en Cláudia comenzaron a manifestarse pocos días después de consumir el alimento contaminado, presentando visión borrosa, mareos y dificultades respiratorias. Estos síntomas llevaron a su hospitalización inmediata en Estados Unidos, donde permaneció bajo cuidados intensivos durante dos meses. Sin embargo, el seguro médico de la joven solo cubría una parte de los elevados costos hospitalarios, lo que dejó a sus padres enfrentando una abrumadora deuda. Ante esta situación, la familia recurrió a la recaudación de fondos en línea para poder trasladar a Cláudia de regreso a Brasil.
A pesar de la gravedad del caso, los médicos se muestran optimistas sobre la recuperación de Cláudia. Aunque actualmente depende de un respirador, ha logrado avances significativos, como recuperar la capacidad de escribir su nombre tras varios meses de tratamiento intensivo. La lucha continúa, pero la esperanza de una recuperación total sigue viva.