El secretario de educación del municipio de Magangué Oscar Menco presentó ante el presidente de la Republica y la ministra de educación un panorama de la situación que vive la educación en esta entidad territorial, el informe presentado circula en video en las redes sociales, expone avances logrados como ser la entidad territorial que más ingresó estudiantes al sistema con 1200 pasando a tener un registro de más de 27 mil estudiantes, pero lo que él llama premio del gobierno fue un recorte del presupuesto de una vigencia a otra del 35% en calidad educativa.
Las cifras que presentó aducen a un recorte que significó del año 2017, cuando el municipio le llegó 3900 millones al 2018 cuando solo se presupuestaron 2850 millones, lo que trae como consecuencia el recorte de inversión para calidad educativa.
La situación empeora cuando presenta el dato que la empresa Electricaribe se lleva aproximadamente 900 millones de pesos por el servicio y el resto se queda en el servicio de transporte escolar a las 83 sedes educativas que tiene el municipio. La solicitud es que el nuevo gobierno logre enviar un complemento para la vigencia a través de una reasignación de recursos.
Pero la problemática también toca el aspecto de infraestructura, según el secretario de educación hay en el municipio 117 aulas palafíticas que cumplieron su vida útil, y hoy hay 8000 alumno en un alto riesgo por la situación precaria en que se encuentran.
El problema de la educación aumenta cuando se toca la situación de la planta administrativa, para las 20 instituciones que cuentan con 83 sedes solo hay 45 administrativos, que cumplen labores de aseo, vigilancia y secretario del simat, situación que altamente preocupa, se requiere lograr viabilizar una planta administrativa que cuente con los recursos disponibles en esfuerzo común.
Este panorama de la educación se repite en los entes territoriales del país, la situación es compleja y si algo hay que reprochar en el gobierno de Santos es en la educación, cuando debería convertirse en el apalancamiento del desarrollo del país, la educación pelea con sus propios demonios, representados en la poca financiación del Estado y mala aplicación de algunas políticas.
Se debe buscar un apalancamiento conjunto entre los entes territoriales y gobierno nacional, desde el ministerio de hacienda y educación. Por un lado, un gobierno que entienda que la financiación de recursos debe promover una verdadera educación de calidad con todos los elementos, que mineducación debe actuar y acompañar a los municipios en resolver dificultades de planeación y decisión, y los municipios en realizar los esfuerzos propios para impactar el sector educativo como la herramienta de desarrollo que debe ser para sus municipios.
La situación se debe empezar a resolver desde las cabezas y con la participación de todos los actores, mientras la problemática podría tratarse son paños tibios pero los problemas estructurales de la educación publica de seguro van a continuar sino se plantea una verdadera reformulación del sector.