Varias veces hemos discutido sobre cómo los alimentos que ingerimos afectan nuestra piel. Y mientras algunos aseguran que el acné y los odiados granitos aumentan en directa proporción con la cantidad de chocolate que comemos, otros dicen que no existe correlación, y unos más radicales aseguran que pueden decir inmediatamente el tipo de alimentos que comen con solo notar la forma en que su rostro está envejeciendo… ¡y es verdad!
Aunque nos ubiquemos en un punto intermedio, está comprobado científicamente que el aspecto de nuestra piel está relacionada con nuestra salud digestiva. Por lo mismo a veces es posible cómo ciertas partes de nuestro rostro reaccionan al estrés generado en el intestino, dependiendo de los tipos de alimentos o bebidas que no toleremos.
¿Todavía no nos crees? Te mostramos cómo ciertos hábitos afectan tu rostro sin que lo notes, y luego nos cuentas si era el café el que te causaba ojeras o el vino el culpable de tus mejillas rojas.
Cara de azúcar
¿Cómo te ves? Líneas y arrugas en la frente, bolsas debajo de los ojos, mirada demacrada, espinillas dolorosas en toda la cara, adelgazamiento de la piel, cutis grisáceo, cejas más delgadas.
¿Por qué? El exceso de azúcar puede alterar las bacterias en tu intestino dando el paso a granos. Según Face Mapping (una creencia antigua que vincula partes de tu rostro con los órganos de tu cuerpo), tu tracto digestivo está vinculado a tu frente, por lo que verás manchas secas y espinillas allí.
Por otra parte, los peaks de insulina pueden ejercer presión sobre las glándulas suprarrenales, lo que en parte controla el crecimiento de las cejas, por eso su adelgazamiento o escasez.
Cara de vino
¿Cómo te ves? Líneas pronunciadas o enrojecimiento entre los ojos, párpados caídos, poros dilatados, piel deshidratada con líneas en las mejillas, nariz rojiza, pliegues nasolabiales profundos.
¿Por qué? El alcohol te deshidrata y empeora las líneas y arrugas. Según Face Mapping, el área entre las cejas está vinculada a la salud del hígado, por lo que puede ver más líneas aquí. El alcohol también puede hacer que los vasos capilares se dilaten, dando como resultado mejillas enrojecidas.
Cara de gluten
¿Cómo te ves? Mejillas hinchadas, parches de pigmentación oscura o manchas alrededor de la barbilla.
¿Por qué? Un aumento en las reacciones inflamatorias en tu cuerpo -causadas principalmente por el gluten- puede provocar hinchazón o enrojecimiento de la piel. Si reaccionas a este componente, tu sistema hormonal puede desencadenar granos alrededor del mentón y tu sistema reproductivo pude verse afectado.
Cara de lácteo
¿Cómo te ves? Párpados hinchados, bolsas y círculos oscuros debajo de los ojos, pequeñas manchas blancas y bultos en la barbilla.
¿Por qué? Una intolerancia a la lactosa común también puede afectar el sistema inmunológico y generar más respuestas inflamatorias en el cuerpo. Al igual que ocurre con un tobillo hinchado cuando lo dañas, tus ojos pueden hincharse y las bolsas se vuelven más pronunciadas.
Las hormonas de estrógeno y progesterona en la leche causan que las células de la piel produzcan en exceso, lo que bloquea los poros, se unen con el sebo y se generan manchas.
