La Vuelta a Burgos celebra su 40ª edición como una de las carreras provinciales supervivientes en el calendario que, por fechas y recorrido, se presenta como un magnífico test para la Vuelta a España que arranca el 25 de agosto. Así se lo ha tomado el Astana, uno de los cuatro equipos World Tour que participan, que alineará una formación liderada por Miguel Ángel Supermán López, el colombiano que tras explotar en la ‘grande’ española en 2017 este año fue tercero en el Giro. Junto a Pello Bilbao, sexto también en Italia, intentarán ganar sensaciones.
En cuanto al resto de la participación, David De la Cruz, tras regresar a la competición en la Clásica de San Sebastián, aparece como líder del Sky, responsabilidad que también le recaería en la Vuelta si se confirma como parece, las bajas de Froome, Thomas y el accidentado Bernal. El Movistar de Barbero, Anacona o Valls, y el Dimension Data de Antón y Cummings, las otras dos escuadras participantes de la máxima categoría. Todas ellas estarán en Málaga el 25 de agosto en la Vuelta, a donde miran también el Euskadi Murias, el Caja Rural y un Burgos que afronta la carrera de casa necesitado de resultados.
Hoy, en la primera etapa, ya habrá emoción en un desenlace clásico como es la llegada al Alto del Castillo de Burgos, aunque a priori la carrera se decidirá en las dos etapas de alta montaña: el jueves con llegada al Picón Blanco de categoría especial y el tradicional final de carrera en Las Lagunas de Neila el sábado.