SI SE SIGUEN VACUNANDO 200 MIL PERSONAS AL DÍA LA INMUNIDAD DE REBAÑO PUEDE TARDAR HASTA 2022.
Con la lentitud que avanza la vacunación en Colombia, el país alcanzaría la inmunidad de rebaño a finales de 2022 o comienzos del 2023, lo que implicaría casi dos años más de contagios, enfermedades y muertes por la pandemia y restricciones con efectos catastróficos en lo económico, lo sicológico y lo social.
Colombia se acerca a los 5 millones de vacunas aplicadas, sólo 1.6 millones de ciudadanos han recibido la segunda dosis, la cual es fundamental para que se logre el efecto de inmunización, y para alcanzar la inmunidad de rebaño se requiere que al menos 35 millones, de los 48 millones de habitantes del país, tengan el esquema de vacunación complejo. Realmente, estamos lejos de alcanzarlo.
Hace una semana Israel, que llegó a la inmunidad de rebaño mediante una efectiva y acelerada estrategia de vacunación, reactivó todos sus sectores y eliminó el uso obligatorio del tapabocas en los espacios públicos.
Con ese ejemplo, Colombia debe acelerar su proceso de inmunización, pues a un ritmo de 200 mil vacunas diarias, que en ocasiones son menos, el país puede caer en el caos, tanto por lo sanitario como por lo económico, antes de que se alcance la inmunidad.
En ese sentido, además de intensificar sus gestiones para que las farmacéuticas aumenten y agilicen los envíos de dosis a Colombia, el Gobierno Nacional debe facilitar e incentivar la compra de vacunas por parte de privados, no sólo para que las empresas adquieran inmunizantes para sus trabajadores, sino también para que las clínicas las ofrezcan. Miles de personas que están en capacidad de pagarla podrían aplicársela anticipadamente y, así, además de protegerse a sí mismas, harían un gran aporte social, pues contribuirían a la disminución de contagios y muertes. El objetivo no puede ser otro que alcanzar la inmunidad de rebaño en el 2021.