Con frecuencia escuchamos y leemos en textos de historia y bíblicos, de palestina, Judea, galilea, y muchos por confusión interpretan que son regiones distintas, resulta importante saber sobre este punto lo siguiente; sesenta y cuatro años más o menos antes de cristo, Pompeyo conquistó a la región, llamada Palestina, para extender el dominio del imperio romano hasta oriente medio, palestina, es un territorio de unos 30.000 km2, tiene la figura de un trapecio, atravesado de norte a sur, por un sistema montañoso de poca altitud y limita al oeste con el mar mediterráneo y al oeste con el valle del rio Jordán. Pero, al mismo tiempo dicho territorio estaba dividido en cuatro provincias; Galilea, Samaria, Judea y Perea; aldeas o ciudades para esa época estaban comprendidas dentro de una provincia en particular, la ciudad de Naim, en donde Jesús en tiempo de su apostolado, a la entrada de la ciudad con su comitiva, se detuvo al paso de una multitud en la que transportaban en hombros el féretro de un joven muerto, hijo, de una viuda que lloraba desconsolada, tanto era el llanto de la mujer, que conmovió a Jesús y lo motivó a acercarse al féretro, lo tocó y pronunció las siguientes palabras, joven a ti te digo levántate y el muchacho se incorporó y empezó hablar con su madre, ante el asombro de todos los que estaban contemplando el suceso, todos glorificaron a Dios diciendo: un gran profeta se ha levantado ante nosotros, mi Dios ha venido a visitar a su pueblo. Caná y Nazaret más el primero mencionado del milagro, pertenecían a la provincia de Galilea, es por ello que a Jesús por desprecio lo llamaban, galileo, porque sus habitantes lo consideraban paganos, debido a la situación geográfica de galilea, que quedaba en medio de una importante ruta comercial con intenso tráfico de caravana que favoreció que en esa provincia se mezclaran distintas etnias y culturas, es decir, eran vistos como palestinos no puros, o para mejor decir, mal visto; como puede ser ese el mesías, nacido en Nazaret, donde no nace nada bueno, Samaria y Judea, esta última más meridional del territorio palestino, predomina un macizo montañoso muy accidentado, con capital Jerusalén, ciudad santa para los judíos, sede de la formación religiosa del mundo en el momento y de la autoridad suprema, igual, estaban en esa jurisdicción, Betania, Belén, Emaús o Jericó, considerada la ciudad más antigua del mundo.
De todos los monumentales milagros que fueron muchos realizados por Jesús, en tres años, como consecuencia de su muerte, el de mayor resonancia histórica, lo fue la resurrección de lázaro; ¿por qué? cuando Jesús con anterioridad había resucitado a otros, a la hija de su amigo, Jairo, un jefe de una sinagoga en Cafarnaúm, al del hijo de la viuda en Naim.
Marta y María eran de las entrañas de Jesús, las quería mucho y eran unas de sus más fervorosas seguidoras de sus predicas y el mismo lázaro gran amigo de Jesús, y muy creyente de sus promesas, pero además, la relevancia de la resurrección de lázaro fue debido a que lázaro y su familia gozaban de una elevada posición social en la región; era una familia respetada desde todos los puntos de vista. A nivel de personas, algunos ilustrados, hasta sacerdotes y escribas y con una devoción religiosa muy reconocida en la zona; cuando lázaro estaba en su agonía, Marta mandó a un mensajero a buscar a Jesús quién se encontraba en un lugar distanciado a Betania, cuando el intermediario localizó al mesías y lo puso al tanto del estado moribundo de su amigo; oyó lo que le dijo y se quedó dónde estaba por dos días, cuando convidó a su comitiva a que lo acompañaran a casa de Marta y Lázaro, al llegar y al verlo Marta y María, se postraron a sus pies con los ojos llenos de lágrimas, SEÑOR, SI HUBIERAS ESTADO AQUÍ NO HABRÍA MUERTO MI HERMANO, Jesús también lloró, ¿dónde lo habéis enterrado?, ya, lázaro tenía cuatro días de muerto y es, más embalsamado de acuerdo a las costumbres judía, que eran diferentes de las egipcias para el tiempo, fueron todos al sepulcro, antes Jesús, sentenció: este hecho servirá de testimonio de la grandeza de Dios (y así ha sido), Jesús, con lágrimas en el rostro, ordenó que quitasen la loza de la entrada de la tumba, en el acto Marta, le advirtió a Jesús que el hedor podía ser muy insoportable porque su hermano llevaba cuatro días de muerto, Jesús, insistió en que quitaran la loza y obedecieron su mandato. Cuando quitan la loza Jesús reza en voz alta, TE DOY GRACIAS PADRE PORQUE ME HAS ESCUCHADO. YO SÉ QUE SIEMPRE ME ESCUCHAS, PERO LO HE DICHO POR LA MULTITUD QUE ESTÁ ALREDEDOR PARA QUE CREAN QUE TÚ ME ENVIASTE, ¡LÁZARO SAL AFUERA!, todos quedaron paralizados al ver salir al muerto con el sudario y el cuerpo envuelto en vendas, vivo y con una mirada de sorpresa en el rostro, dicho famoso milagro adquirió fama a la luz de rayo en toda la región, fue otro motivo de indignación de los judíos que defendían la doctrina antigua y fue el hecho decisivo para que el sanedrín preparara la muerte de nuestro redentor.
Existió un pueblo que acompañaba a Jesús en su peregrinación que eran los Zelotes, grupo, rebelde y violento y muy fanático, que, se oponían a la dominación romana en la época, creyendo que Jesús por la innovación de la doctrina respecto a Dios y a su reino que él pregonaba podía liderar una sublevación en contra del imperio romano y eso lo esperaban los Zelotes para conseguir una palestina libre y gobernada del todo por ellos mismo y en nombre de Dios, pero, con el trascurso del tiempo se dieron cuenta que los fines de Jesús, eran muy diferentes, muchos los dejaron de seguir por esa razón; es la hora que dan la idea de Jesús como la de un revolucionario.
Un punto muy importante; y que debí incluir al principio del artículo, cuando caminaba Jesús con la cruz a cuestas con destino al Gólgota, en el momento en que sentía sólo, hasta los niños le tiraban piedras, de lado y lado de las vías escuchaba insultos, de un momento a otro salió de las filas de la multitud una mujer que mostraba compasión por el estado penoso que presentaba el mesías, con los pies descalzos con llagas y sangrientos igual su rostro por la corona de espina que le pusieron sobre su cabeza, esa mujer fue Serafia y aprovecho para dar claridad, hasta yo creía que se llamaba, verónica, con el trascurso del tiempo pasó a llamarse verónica porque el paño que utilizó esta mujer para enjugar la cara ensangrentada de Jesús, quedó impreso el rostro del señor y verónica, significa, verdadero retrato.
La resurrección constituye para nosotros los cristianos el acontecimiento clave de la doctrina de la salvación, según la cual el género humano alberga la fe que de morir resucitarán o resucitaremos y los que estén vivos en el fin de los tiempos, tendrán vida eterna.
Así, como quien escribe este articulo creyente de la existencia de Dios, existen más de mil trecientos millones en el planeta, que creen en que Jesús, existió, pero independiente a todo eso, no ha habido un hombre en la historia de la humanidad del que se haya hablado y escrito tanto o igual a Jesús y venerado por más de dos mil años. Pero además de la biblia que da testimonio que Jesús existió y los milagros que hizo, poco después de la muerte de Jesús los más destacados historiadores para ese tiempo como lo fue Suetonio (75 años d.c) documentó con buenos conocimientos de la existencia de Jesús en el mismo sentido tácito y el más sobresaliente la del historiador Fabio Josefo (37 años A.C) que fue como quien dice contemporáneo de los apóstoles, investigó y documentó en textos de historia, la vida y obra de Jesús.
Los doce apóstoles escogieron a Matías, para que sucediera a Judas el traidor para que siguieran los doce completos que representaban las doce tribus de Israel.
