
El doctor Sergio Alfieri, del hospital Gemelli de Roma, informó este viernes que, aunque el papa Francisco ha mostrado mejoría, su estado de salud sigue siendo delicado debido a su edad y las complicaciones derivadas de la neumonía bilateral y una infección polimicrobiológica.
Aunque los médicos aseguraron que “su vida no corre peligro en este momento”, enfatizaron que el pontífice no está fuera de peligro y su recuperación tomará tiempo. Se espera que permanezca en el hospital al menos una semana más antes de continuar su tratamiento en su residencia en Santa Marta.
Los especialistas explicaron que el papa sufre bronquiectasia y bronquitis asmática crónica, lo que lo hace más vulnerable a problemas respiratorios. Sin embargo, destacaron que su corazón está fuerte y que ha respondido bien al tratamiento.
A pesar de la fragilidad de su estado, Francisco sigue mostrando su fortaleza y buen ánimo. Hoy mismo acudió a la capilla del hospital a rezar y ha intentado mantenerse activo. Aunque no requiere respiración asistida, recibe oxígeno ocasionalmente.
Uno de los mayores riesgos que enfrentan los médicos es la posibilidad de que alguna bacteria de la infección ingrese al torrente sanguíneo y cause una sepsis, lo que complicaría gravemente su recuperación. Sin embargo, hasta el momento, no hay signos de esa complicación y se han reducido algunos medicamentos.
El equipo médico del hospital Gemelli sigue monitoreando de cerca su evolución, mientras los fieles en todo el mundo continúan orando por su pronta recuperación.