Rechazamos tajantemente todos los actos violentos, en especial el terrorismo, venga de donde venga, es necesario hacer la precisión en Colombia ya que sabemos que éste es un país polarizado y enfrentado.
Definitivamente el Eln hizo trizas el proceso de paz, ya es costumbre en este grupo alzado en armas, también así fracasaron otros procesos de paz. El gobierno por su parte no tenía intenciones de continuar los diálogos y éste acto terrorista aceleró y justificó la terminación de los diálogos.
Ahora viene un largo periodo de confrontación que traerá muertos de ambos bandos, que al final de cuentas todos son ciudadanos colombianos, también resultarán afectados los civiles, el medio ambiente y las rentas del país por la forma como esta guerrilla actúa.
54 años de fundado tiene este grupo guerrillero, si en ese tiempo las fuerzas armadas del estado colombiano no han podido hacer que desaparezca, es difícil creer que se vaya hacer en 4 años, la confrontación armada solo ha agudizado el conflicto en Colombia, es muy fácil exigir confrontación desde los escritorios, desde el congreso y en las redes sociales, lamentablemente los muertos los ponen las familias humildes de Colombia como son las de los cadetes de la escuela de policía y las familias de los combatientes del grupo armado, que muchos fueron reclutados forzadamente.
Aunque en este momento carezca de sentido por el dolor nacional, hay que ver el conflicto en la perspectiva del tiempo y hoy más que nunca debe quedar claro a todos los colombianos que siempre es mejor la paz que la guerra, ambos cuestan, sin embargo, es mejor pagar por una paz, aunque sea difícil, que pagar por una guerra más complicada, destructiva y eterna.
Como colombianos que queremos vivir en un país en paz, exigimos a las guerrillas y los grupos alzados en armas que cesen los actos violentos y al gobierno nacional comprender que solo llegando a un acuerdo es como se soluciona el problema del país, hay que ponerle punto final a más de 70 años de conflicto interno, por la forma del conflicto del país siempre los civiles resultamos afectados, a parte que ya estamos cansados de esta guerra interna, debemos dejar para la historia esa enciclopedia de conflictos armados y seguir construyendo un mejor país para las futuras generaciones de colombianos, donde haya justicia social, oportunidades, bienestar, respeto por la vida y un ejercicio político serio y responsable donde se pueda trabajar colectivamente para mejorar como nación y no para destruirnos mutuamente.