
Son 32 años y 5 meses de prisión los que le esperan al exinfante de Marina Samir Elías Romero Pérez tras ser capturado por la Policía en un retén entre Sincelejo y Toluviejo con 50 cartuchos calibre 7,65 milímetros.
Romero Pérez, de 39 años, es uno de los cinco miembros de la Primera Brigada de Infantería Marina condenado por la muerte del agricultor Israel Arturo Mendoza Gutiérrez, ocurrida en un caso de “falso positivo” el 20 de agosto de 2005 en área rural de El Carmen de Bolívar, sector de El Aceituno.
Además de ser requerido por aquella ejecución extrajudicial, el exmilitar tiene antecedentes por el delito de porte ilegal de armas de fuego.
Samir fue sentenciado junto con sus compañeros Nelson Rafael González Luna, Luis Guillermo Quiroz Jaraba y Edison Corrales Ruiz como coautores del delito de homicidio en persona protegida. El fallo contra ellos fue dado a conocer a principios de este mes, luego que la Sala de Decisión Penal del Tribunal Superior de Cartagena ratificara la condena de 390 meses de prisión contra el suboficial Víctor Miguel Salazar Jiménez y revocara la libertad de los otros cuatro militares que hacían parte del Grupo de Reconocimiento Cobra 15 del Batallón de Infantería No. 31 con sede en Corozal, Sucre.
En su fallo, el Tribunal ordenó la captura inmediata de los cuatro militares. Todos ellos habían sido absueltos en una decisión de primera instancia del Juzgado Promiscuo del Circuito de El Carmen de Bolívar de Descongestión el 12 de noviembre de 2014. Esa decisión fue apelada por la Fiscalía 33 Especializada de la Unidad de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario.
Dos presos
Con Samir Romero ya son dos los militares en la cárcel por la muerte de Israel Arturo. El otro es el suboficial Víctor Salazar.
La víctima del “falso positivo”, Israel Arturo era un campesino que a diario se trasladaba a la vereda San Rafael, en la vía que va de El Carmen a Zambrano, para cuidar los cultivos de pancoger que tenía en esa zona y así ganarse el sustento para su mujer e hijos.
Ese sábado de agosto de 2005, Mendoza Gutiérrez se trasladó a San Rafael a eso de las 8 de la mañana del sábado. Unos 10 minutos después, se escucharon los disparos.
“De inmediato las tropas de Infantería de Marina que siempre han permanecido cerca formaron todo un escándalo que daba la sensación de que había un combate. Nosotros, al escuchar eso, abandonamos enseguida el lugar y cuando llegamos a la carretera unos infantes de Marina nos montaron en un vehículo para que nos viniéramos, sin saber que había pasado con Israel y el burro donde iba montado a buscar el agua”, relató en aquella oportunidad un testigo.
Uno de los hermanos de Israel contó que una vez se enteraron de la situación empezaron a indagar, asegurando que en horas de la tarde les informaron de un muerto que había sido trasladado por la Infantería de los lados de Zambrano al casco urbano de El Carmen.
“Fuimos a la morgue del Hospital Montecarmelo y nos enteramos que se trataba de él. Pero la indignación más grande me dio fue ver su cadáver vestido con uniforme camuflaje. Eso es un montaje, mi hermano era un humilde agricultor”, señaló esa vez el familiar.