Dos retenes es la única posibilidad que tiene hoy los colombianos para que el gobierno del presidente Duque y su ministro de Hacienda Carrasquilla, logren llevar a la práctica la aplicación del Impuesto al Valor Agregado, IVA, a toda la canasta familiar.
La canasta familiar está compuesta por 181 productos y según muchos economistas que han expresado su opinión sobre este tributo obligatorio, su aplicación desestimularía el consumo por parte de los colombianos.
E primer reten será el del congreso de la república en donde el gobierno no la tiene para nada fácil, pues seguros solo tiene los votos del Centro Democrático –partido que lo llevo al cargo- posiblemente los de Cambio Radical y el Conservatismo, que no hacen la mayoría necesaria para su aprobación.
En contra están el partido Liberal, los Verdes, El Polo y demás partidos independientes que no le jalan a esta reforma tributaria aunque al gobierno se le haya dado por darle el nombre de fortalecimiento económico.
Ahí, en el congreso pueden quedar sepultadas las intenciones del gobierno nacional de aplicarle el IVA del 19% a toda la canasta familiar.
Pero si el gobierno hace uso de la mal llamada mermelada para logra su aprobación no puede cantar victoria, pues le quedaría el segundo reten, talvez el más duro de los dos porque se trata de la Corte Constitucional, quien debe avalar la constitucionalidad de la norma aprobada por el congreso.
Varios Constitucionalistas han hecho público su concepto en el sentido de la inconstitucionalidad de la misma por conceptos que serían muy largos de explicar, pero que están en el marco jurídico de nuestra Carta Magna de 1991.
El gobierno busca con esta reforma tributaria cubrir un hueco fiscal que supera los 17 billones de pesos y la pregunta sería, porque el pueblo vía impuestos debe pagar los errores del ejecutivo central?.
Para completar, lo difícil que la tiene el gobierno con esta reforma tributaria, no es claro como el gobierno hará la devolución de ese IVA a los más colombianos pertenecientes a los estratos bajos.